Un cuento onírico El ornitólogo El puesto de observación estaba construído con piedras y barro, el techo provisional era de lona y allí se encontraba Jacinto con su cámara, armada con un potente teleobjetivo, observando y filmando la evolución de unos polluelos del águila pirináica. Hacía frío para ser principios de primavera. De pronto una espesa niebla dificultó el trabajo del ornitólogo que decidió recoger sus bártulos y regresar al calor de la estufa del refugio. Biarritz amaneció con un cielo muy azul aquella fresca mañana cuando la aventurera Celine d'Amergent revisó su paramotor Airfer Explorer 2 antes de volar sobre su ruta favorita, desde el Club de Golf de Biarritz hasta San Juan de Luz, unos cuarenta quilómetros sobre una bella costa. A pesar del miedo de su esposo e hija Celine notaba la necesidad de evadirse de vez en cuando volando sobre el mar, muy cerca de la costa como siempre le aconsejaba su familia y amigos. De vuelta a su base, muy cerca de Bidart, notó como u
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